Beneficios de practicar mindfulness para autónomos
Colaboraciones
Si eres autónomo, en e-autónomos te ofrecemos la posibilidad de publicar tus artículos, siempre que traten temas de interés para nuestros lectores. Hoy contamos con la colaboración de Carmen Saiz, coach profesional, formadora en habilidades para el bienestar e instructora de mindfulness, que inspira a sus seguidores a crecer en Consciencia, Confianza, Serenidad… y en este artículo nos hará crecer gracias al mindfulness.
Puedes conocerla a través de su perfil en LinkedIn o en Facebook y Twitter.
¡Muchas gracias, Carmen, por este artículo tan inspirador que transmite paz!
Mi intención con este artículo es responderte a estas dos preguntas: ¿En qué puede ayudarte la práctica de mindfulness siendo autónomo? y ¿Cómo lo hace?
Los beneficios que llegan con la práctica te los señalaré al final del artículo. Ahora te animo a practicar la atención leyendo el artículo completo con curiosidad y apertura, de forma que si se te va la mente a otro asunto mientras lees, vuelvas de nuevo tu atención al artículo con cariño, sin reproches por haberte distraído… ¡esto es mindfulness!
¡Vamos allá! Para comenzar te voy a describir las 3 habilidades que se desarrollan con la práctica haciendo posible que lleguen los beneficios.
¿Preparado? Son estas: Calma, Claridad y Confianza.
Calma versus Nerviosismo
Imagina que de repente un día te despiertas y te encuentras con que estás viviendo dentro de una pandemia mundial. Muchas cosas han cambiado y muchas otras cambiarán, no es difícil de imaginar, ¿verdad?
Bien, pues pandemia significa cambios rápidos y globales, significa que vamos a necesitar ser flexibles y adaptables al entorno en el que vivimos y más concretamente vamos a necesitar desarrollar esa flexibilidad como autónomos y emprendedores.
Quizás ya no puedas seguir desarrollando tu trabajo como lo venías haciendo, y tengas que plantearte compatibilizar tu trabajo de autónomo con otro por cuenta ajena. O al revés, quizás ves peligrar tu trabajo actual y quieras emprender un proyecto nuevo…
En cualquier caso, para adaptarte y salir fortalecido con los cambios actuales, ¿a quién elegirías como compañero de viaje, a la calma o al nerviosismo?
Practicar mindfulness no te va a evitar tener que enfrentarte a los cambios. Vas a vivirlos de todas formas (nos guste o no, es así), porque forman parte del hecho de estar vivos, y esto es lo que desarrollamos con mindfulness la capacidad de vivir lo que está sucediendo con la mayor calma posible.
Claridad versus Confusión
Desarrollar la habilidad de tomar perspectiva para ver más claro es maravilloso. Cuando tenemos la cabeza llena de ideas, pensamientos, recuerdos, historias, y nuestra atención va saltando de una a otra como una mosca revoloteando de aquí para allá, lo que experimentamos es un estado de confusión, de ver poco claro qué decisión tomar, hacia donde ir, etc.
Con este estado mental de torbellino caótico favorecemos los automatismos, que son procesos aprendidos que saltan sin que nosotros los elijamos conscientemente. Como, por ejemplo, hacer lo primero que se nos pasa por la cabeza en vez de atender los asuntos importantes que sabemos que son los que marcan la diferencia en los resultados de nuestro trabajo.
¿Te ha pasado alguna vez que en vez de preparar ese documento o hacer esa llamada que es importante para el desarrollo de tu trabajo, te pillas haciendo cualquier otra cosa como respondiendo a un mail sin importancia o borrando tu bandeja de entrada? Pues esto es lo normal, es lo que nos pasa cuando no tenemos una atención entrenada.
Con mindfulness lo que hacemos es entrenarnos en prestar atención de forma intencionada en el momento presente con curiosidad y aceptación, para así poder ver cada vez con mayor claridad y sin juicio lo que estamos haciendo en cada momento y tomar las decisiones más adecuadas para nosotros, en este caso en el terreno laboral.
Esta capacidad de aumentar nuestra perspectiva está relacionada con el aprendizaje de mejorar la gestión del tiempo, algo importantísimo para los autónomos y que requiere aprenderlo.
Diferenciar lo urgente de lo importante es el primer paso y el segundo es darte cuenta de cuando te has liado con algo urgente (no importante) para parar y salir de ahí. Ese “darte cuenta” es lo que aprendemos con mindfulness.
A través de la práctica diaria formal aprendemos a enfocar la atención en nuestra respiración y cuando nos damos cuenta de que nos enganchamos con cualquier pensamiento o distracción, dirigimos de nuevo nuestra atención a la respiración, haciendo esto una y otra vez, de forma que trasladamos este “darnos cuenta” a nuestras actividades diarias. Así logramos que cuando nos distraemos y enganchamos con alguna actividad no importante, podemos parar, dejar de hacerlo y volver a lo importante.
Recuerda que no podemos cambiar, lo que no hemos hecho consciente (darse cuenta), y no es lo mismo darse cuenta al minuto que al cuarto de hora, ¿no crees?
Confianza versus Inseguridad
El desarrollo de la confianza con la práctica de mindfulness fue toda una sorpresa para mí. Resulta que el reconocimiento y la conexión con nuestro cuerpo a través de la percepción de nuestras sensaciones hace que de forma directa conectemos con el presente, ya que el cuerpo siempre viene con nosotros allá donde vayamos, ¿verdad?
En cambio la mente es otra historia. Normalmente se mueve en la línea del tiempo de pasado a futuro buscando cualquier cosa… y te preguntarás, ¿y esto qué tiene que ver con desarrollar la confianza? Pues mucho, verás…
A través de practicar la conexión con tu cuerpo en el instante presente, aprendes a autorregular tus emociones (que se expresan en el cuerpo) y cuando nos vamos dando cuenta de que somos capaces de vivir cualquier emoción, deja de darnos miedo sentir emociones desagradables. Porque aprendemos a través de la práctica que igual que las emociones llegan se van si no ponemos resistencia.
Esto tiene innumerables implicaciones en nuestro trabajo diario, porque la autorregulación emocional nos proporciona la confianza que necesitamos para vivir con apertura todos los cambios y desafíos que se dan en el día a día, teniendo la certeza de que saldremos adelante de la forma más satisfactoria posible.
Eso es la confianza, la percepción de que eres capaz de afrontar los desafíos que se van a presentar inevitablemente en tu desarrollo como autónomo o emprendedor de una forma satisfactoria.
En el lado opuesto estaría la inseguridad, que es la percepción de que no vas a ser capaz de afrontar las dificultades que se presenten.
Resumiendo…
Desarrollando la calma, la claridad y la confianza a través de la práctica de mindfulness los beneficios que te reportarán son estos:
– Reducción del estrés
– Mejora en la gestión del tiempo
– Aumento de la satisfacción laboral
– Mayor efectividad
– Incremento de la concentración en lo que estás haciendo.
– Apertura de la creatividad para resolver problemas.
¿Qué te parecen? ¿Te resultan interesantes?
Para disfrutar de estos beneficios sólo hay un requisito esencial e imprescindible: ¡practicar!
Puedes leer un libro, recopilar información o apuntarte a un curso de introducción al mindfulness. ¡Y eso está bien! Pero recuerda, sino añades la práctica, es como si te informas de 10 formas diferentes de hacer un rico y sano helado casero y no haces ninguna… ¡te quedas sin helado!
¡Ojalá leer este artículo te haya despertado la curiosidad para probar, comenzar o retomar tu práctica de mindfulness, contribuyendo de este modo a crear un entorno laboral más satisfactorio tanto para ti como para tus clientes y colaboradores!
Y para despedirme ¡un regalo! Aquí tienes un audio de 5 minutos para saborear mindfulness: enlace.
¡Gracias por tu atención!
Con cariño,
Carmen Saiz
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